Ser tu mismo ser Autentico y Tener Valores

La Educación Humanista (El enfoque centrado en el Cliente), donde cada uno es el experto de su propio aprendizaje. La Autenticidad implica desarrollo de Valores: -Ser Mejor persona -Ser más confiable -Momentos autenticos Ser Humano auténtico ¿Quién es el ser humano auténtico? Quien expresa sus sentimientos, tendencias, deseos, pensamientos y decisiones en conformidad con su identidad íntima y esencial. La pregunta de quién es una persona auténtica se transforma de inmediato en esta otra: ¿Qué es el hombre? El Vaticano II observa que muchas son las opiniones que el hombre se ha dado y se da sobre sí mismo. Diversas e incluso contradictorias. Exaltándose a sí mismo como regla absoluta o hundiéndose hasta la desesperación. La duda y la ansiedad se siguen en consecuencia (Cfr. GS n.12) Esto sugiere que todo intento del hombre de autodefinirse a sí mismo y con las fuerzas de la sola razón y su ciencia no son suficientes. El hombre es un misterio y lo experimenta y la razón no alcanza a dar razón. ¿Entonces cómo conocer la respuesta? La Biblia nos enseña que el hombre ha sido creado "a imagen de Dios, con capacidad para conocer y amar a su Creador, y que por Dios ha sido constituido señor de la entera creación visible para gobernarla y usarla glorificando a Dios. ¿Qué es el hombre para que tú te acuerdes de él? ¿O el hijo del hombre para que te cuides de él? Apenas lo has hecho inferior a los ángeles al coronarlo de gloria y esplendor. Tú lo pusiste sobre la obra de tus manos. Todo fue puesto por ti debajo de sus pies" (Ps 8,5-7) La luz de la Revelación y la Fe nos descubren la identidad plena del hombre. La autenticidad que nos interesa es la que hace siempre referencia a la esencia espiritual del hombre. La vida del hombre no es un ir pasando, sino es una historia que busca un sentido; sus tendencias y aspiraciones están destinadas a someterse al escrutinio de la conciencia que aprueba o rechaza. En este sentido la autenticidad es la expresión de un ideal a conquistar de acuerdo a la imagen del hombre integral que la razón y la fe dibujan en la conciencia. La autenticidad comprende las tres dimensiones de la experiencia humana: pensamiento, voluntad, sentimiento. Autenticidad del pensamiento mediante la convicción. Significa estar convencidos entre lo que se dice y se piensa. La persona no auténtica en su pensamiento es la que, por no estar convencida de lo que piensa o juzga, su hablar se convierte en charlatanería. Por lo tanto, la autenticidad de pensamiento depende de la convicción vital acerca de lo que pensamos o juzgamos. De ahí la importancia que tiene para todo cristiano esta autenticidad de pensamiento. Estar convencidos para ser auténticos hijos de Dios, hijos de la Iglesia. La vida del cristiano se asienta sobre el ideal mismo de Jesucristo, sobre los principios de su evangelio, sobre los criterios de la Iglesia fundada por Él. La necesidad de ser personas convencidas para ser auténticas no se puede suplir con otra cosa, no hay alternativa posible. Autenticidad de la voluntad mediante la identificación con el propio fin. Es sinónimo de identificación con el fin. La voluntad es una facultad que nos permite alcanzar nuestros fines; pero es ciega, necesita lo que la razón le presenta para poder actuar. En algún caso la voluntad solo ejecuta externamente aquello con lo que su interior no se identifica y entonces sobreviene la mentira de la voluntad o la actitud de inautenticidad. Cuando vemos una persona cuyo comportamiento es muy tornadizo, es porque su actuación es sólo exterior ya que su interior va por otro sendero, es decir no hay coherencia, hay falsedad, hipocresía. Es la persona que actúa dependiendo si la ven o no la ven, o la que exige comportamientos a los demás de los cuales ella no es capaz de realizarlos. Es la persona inauténtica. Cuando la voluntad es auténtica, entonces la persona se decide por sus metas con toda su existencia. Se ve a esta persona aferrarse a la decisión tomada especialmente en aquellos momentos en que peligra el ideal fijado y aumenta por esa razón la intensidad del querer: se quiere entonces con todos los resortes y todos los recursos a disposición. Si quieres ser un cristiano a carta cabal, debes identificarte cada vez más con el ideal, que es Cristo. Autenticidad del sentimiento mediante los conceptos de jerarquía, compatibilidad y resonancia interior. Hay diversas clases de sentimiento: Debemos jerarquizar los sentimientos para que la vida del espíritu y en general del hombre, no sea caótica. Cuando se deja curso anárquico a los sentimientos, la vida de la persona se hace caprichosa e imprevisible. Cuando los sentimientos acaparan a la persona, el centro de su personalidad se traslada a la piel o al estómago, y en este desahogo pueden llevar a remolque toda la vida de la persona. No queremos decir que hay que reprimir todos los sentimientos pues son parte integrante de la personalidad del ser humano, deben existir, desarrollarse ordenadamente. La clave del éxito es saber jerarquizarlos y desarrollarlos armónicamente. Aunque los enemigos de la autenticidad son múltiples, mencionamos solo dos: 1. El respeto humano y la adaptación a lo que se espera de uno: vivir para el convencionalismo. Es la triste vida del mil máscaras. Ante el temor al "qué dirán" o al "qué van a pensar", la persona está denotando ausencia de valor personal, una gran inseguridad. Se quiebra ante cualquier comentario negativo y se siente apoyada ante un positivo sin distinguir la verdad que hay en el uno o en el otro. Es juguete del “qué dirán”. ¿Podrá una persona así asumir responsabilidades? ¡Imposible! 2. El Conformismo. La persona es producto del ambiente. Y con tal de no esforzarse, se conforma con lo que venga y de dónde venga. Quien se conforma con los valores o antivalores que el mundo le presenta, y no tiene juicio crítico, cae en el conformismo de las costumbres. "Todo el mundo lo hace”. Cristo es la imagen del hombre auténtico que no podía ser pensada mas que por Dios, una imagen que el mundo no es capaz de inventar, ni siquiera de intuir. La atrayente persona de Jesucristo con la armonía perfecta de todas sus facultades, es la revelación del amor de Dios. Cristo es el Hombre Autént